Nuestro equipo de ingenieros de servicio calificados utiliza instrumentos avanzados de prueba de calidad del agua para brindar servicios integrales de tratamiento de agua, capacitación y consulta. El proceso de limpieza química consiste en mantener el nivel normal de agua del sistema operativo e introducir agentes quelantes y activadores eficientes en el agua circulante. Estos agentes interactúan con aceites, escamas y capas de óxido, causando fuertes vibraciones moleculares que rompen la estructura cristalina de los contaminantes, haciéndolos solubles y fáciles de eliminar.

Después del proceso de limpieza química, las superficies interiores de las tuberías del sistema de agua circulante quedan expuestas, revelando superficies frescas y reactivas. En esta etapa, las tuberías se enjuagan con agua limpia. A continuación, se introduce en el sistema un agente de recubrimiento patentado de alto peso molecular, junto con un catalizador. La circulación de estos agentes asegura que se distribuyan uniformemente a través de las superficies recién limpiadas, donde se someten a una reacción química. Esta reacción forma una capa estable y protectora que ayuda a prevenir futuras incrustaciones y corrosión.